Este fin de semana que termina, por segundo año, la escuela de ciclismo de Béjar y Promesal se unían en un marco incomparable como el Albergue de Llano Alto en Béjar, para hacer una convivencia con más de setenta niños y niñas de edades entre los cinco y los quince años.
El ciclismo base de Salamanca, goza de una gran salud, después de unos años de sequía, vuelve a latir con fuerza el deporte del pedal que tantas tardes de gloria ha dado a nuestra provincia.
Allí han podido realizar distintas actividades, desde juegos, bailes, caminatas y por supuesto montar en bicicleta. Sin duda todo un éxito donde los niños salieron muy contentos y disfrutaron de su deporte favorito, compartiendo así amistades entre las dos escuelas.
Desde las direcciones de las dos escuelas agradecer el trato recibido a junta de Castilla y León, consejería de cultura y turismo, dirección general de turismo y deportes.