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IMÁGENES | La Real Fábrica de Paños de Béjar entra en la «Lista roja del patrimonio»

  • Por el «estado de abandono y ruina progresiva, con problemas de humedades y riesgo de colapso del balcón», incluyendo la «pérdida de elementos»

La inclusión de este edificio en la «Lista roja del patrimonio» se produce por el «estado de abandono y ruina progresiva, con problemas de humedades y riesgo de colapso del balcón ubicado bajo el escudo real», incluyendo la «pérdida de elementos», y teniendo en cuenta que su grado de protección legal es: «Protección General dentro del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico-Artístico de Béjar»

HISTORIA

Diversos indicios apuntan a que el origen de la actividad textil en Béjar comienza en el siglo XIII, poco después de que las tierras cercanas fuesen repobladas por el rey Alfonso VIII de Castilla tras la dominación árabe. Ya durante el siglo XV existían en Béjar pequeños centros para la fabricación de paños que, bajo la tutela de los Duques, fueron creciendo y haciéndose poco a poco un lugar importante dentro del mercado español.

La Real Fábrica de Paños de Béjar o Real Fábrica de Don Diego López alcanzó su distinción como “Real Fábrica” el 5 de noviembre de 1782, cuando el rey Carlos III de España emitió la autorización mediante una Real Cédula para teñir paños en la fábrica de Diego López, lo que implicaba la ruptura del monopolio que la casa Ducal de Béjar tenía en la localidad sobre el tinte de paños. Por otro lado, el 25 de mayo de 1785 el propio Carlos III autorizaba, mediante otra Real Cédula, a la colocación del escudo real en la fachada de dicha fábrica, en la que se ubicó acompañado de la leyenda “Real Fábrica de Don Diego López”. En todo caso, el edificio de la Real Fábrica fue construido en el siglo XV como casa solariega, utilizada como palacio de verano del Obispo de Plasencia Gonzalo de Stúñiga, adquiriendo su carácter de fábrica en el siglo XVIII.

DESCRIPCIÓN

La Real Fábrica de Paños de Béjar o Real Fábrica de Don Diego López se ubica en el casco histórico de la ciudad de Béjar (Salamanca), dentro del barrio de La Antigua, situándose frente a la iglesia de Santa María. Se trata de un robusto edificio de 43 metros de longitud compuesto de dos plantas y una altura de 9 metros, estando la planta baja prácticamente ciega al exterior (sólo alberga la puerta de entrada), mientras que la planta superior posee siete ventanas, así como un balcón, sobre el que destaca el blasón real. En su interior se encuentra un amplio patio con arcos trilobulados. Dentro del edificio encontramos también restos de una edificación previa que, según los estudios actuales, se trata en teoría del antiguo palacio del obispo de Plasencia, donde se hospedaría en sus visitas a la ciudad, pues Béjar es parte de dicho obispado.

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