- Ante el incremento del riesgo de incendios forestales por la persistencia de la ola de calor
La Junta de Castilla y León declara ‘Situación de Alarma’ de incendios forestales del 16 al 19 de julio ante el incremento de riesgo de incendios en toda la Comunidad a causa de la persistencia de la ola de calor. Una declaración que exige mayores precauciones que la ‘Situación de Alerta’, dictada el pasado domingo 10 de julio. La norma afecta a todo el territorio de la Comunidad y se solicita a la población que extreme las precauciones y avise inmediatamente a través del 112 sobre la existencia de posibles incendios forestales.
Medidas preventivas y restrictivas
Desde mañana, sábado 16, hasta el martes, 19 de julio, la ‘Situación de Alarma’ obliga a distintas medidas preventivas y organizativas: prohíbe trabajos en el monte y en la franja de 400 metros de terreno que lo circunde con cosechadoras empacadoras, desbrozadoras o equivalentes; tampoco podrán realizarse trabajos con cualquier otra maquinaria que genere deflagración, chispas o descargas eléctricas (sopletes, soldadoras, radiales) ni en el monte y ni en las franjas de 400 metros de terreno rústico que lo circunde. Además, es obligatorio disponer de medios de extinción y personal suficientes para controlar los posibles incendios que se puedan originar como consecuencia de las labores.
La resolución también suspende las autorizaciones de uso del fuego y fuegos artificiales e impide el uso de barbacoas y de los ahumadores de la actividad apícola.
Durante la vigencia de la ‘Situación de Alarma’ se recomienda a toda la población evitar el tránsito libre por los montes excepto en los siguientes casos: el acceso a la propiedad o a entornos urbanos, el desarrollo de las actividades profesionales o de ocio autorizadas, las actuaciones de emergencia o interés general, y para realizar trabajos de vigilancia y extinción de incendios forestales.
La declaración de ‘Situación de Alarma’ obedece al elevado riesgo de incendios forestales ante los altos índices de ignición existentes; cualquier chispa puede originar un incendio forestal con gran potencial de crecimiento y consolidación.
Desde el pasado domingo, una masa de aire caliente en altura está provocando un importante y sostenido incremento de las temperaturas, que desecan totalmente la vegetación y la convierten en altamente inflamable.
En los próximos días y en prácticamente toda la Comunidad se esperan temperaturas máximas que se acercarán, e incluso superarán, los 40 grados centígrados. Se esperan nubes de evolución y vientos intensos en el extremo oeste de Castilla y León, con rachas que pueden superar los 60 o 70 kilómetros por hora. La situación de inestabilidad en altura, por influencia de la DANA, podrá generar nubosidad de tipo convectivo en forma de tormentas secas con poca cantidad de precipitación, pero con posibilidad de rayos y rachas fuertes de viento.
La baja humedad del combustible grueso, sumado a las altas temperaturas y los comportamientos esperables en las capas altas de la atmósfera, incrementan la probabilidad de ignición, propagación y consolidación de los incendios. Factores que provocan que los incendios desarrollen comportamientos convectivos con condiciones de propagación extremas y virulentas, fuera de la capacidad de extinción durante largas fases del día e incluso de la noche.
Ante estas circunstancias, la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio ha declarado, por Resolución del Director General de Patrimonio Natural y Política Forestal, la situación de alarma de incendios forestales por riesgo meteorológico del 16 al 19 de julio.