- El récord del trazado está en posesión del atleta bejarano Miguel Ángel Heras que paró el crono el pasado año en 7 horas y 34 minutos
Así, la Ruta Vetona encara con ilusión una edición muy especial en la que ofrece hasta seis retos deportivos de diferente dificultad: tres para corredores y tres para ciclistas. La localidad de Béjar volverá a servir de epicentro al evento, acogiendo todas las salidas y las metas. El periodo de inscripciones se ha abierto con un total de 2.900 dorsales, a razón de 500 plazas por prueba en la modalidad de carrera a pie y 600 por prueba en las de ciclismo.
Los 100 km de carrera a pie, la prueba originaria de la Ruta Vetona, dará el pistoletazo de salida al fin de semana. Lo hará a las 22:00 de la noche del viernes, con su recorrido habitual de 100 kilómetros y 2.430 metros de desnivel positivo.
Ya el sábado se pondrán en marcha el grueso de las pruebas del programa. El Maratón Vetón, que este año saldrá a las 10:30 para evitar coincidencias en algún sendero con los participantes de las carreras de bici, ofrece 42 kilómetros y 950 metros de desnivel positivo; mientras que la Mini Vetona posee un recorrido de 19 kilómetros.
Entre las pruebas ciclistas, los 100 kilómetros MTB se presenta como la más exigente por distancia y desnivel (2.550 metros de ascenso acumulado).
Los participantes en este caso podrán inscribirse en su modalidad mountain bike o bien en la categoría e-Bike. Por su parte, la Mini Vetona MTB ofrece dos distancias, 49 km y 31 km, ambas también con salida y meta en Béjar y trazados a lo largo de la comarca y sus territorios limítrofes.
Con gran tradición entre los deportistas de la provincia de Salamanca, la Ruta Vetona es una oportunidad excelente para conocer algunos de los lugares más representativos de la comarca de Béjar, zonas de interés turístico como el monte Peña Negra o el castillo de Montemayor del Río. La expectativa de la organización, liderada por la Concejalía de de Deportes del Ayuntamiento de Béjar, es alcanzar una cifra superior a los 1.500 inscritos. Una dato que refrendaría el buen estado de salud de la Ruta Vetona justo el año en que celebra su décima edición.