- El autor proyectó una selección de fotografías contenidas en el libro
El salón de actos del Centro Integrado de Formación Profesional de Béjar fue el lugar elegido por el autor de Mientras los ojos de la memoria… para presentar su nuevo libro de fotografías antiguas de Béjar.
A la cita acudieron muchos bejaranos, ávidos por conocer las propuestas fotográficas de un tiempo pasado, un tiempo vivido y todavía atrapado en la memoria.
El acto comenzó con unas palabras del vicepresidente del Centro, Antonio Avilés Amat, quien pasó el testigo a José Antonio Sánchez Paso, filólogo y escritor. Centrándose en el libro de Antonio Sánchez que se daba a conocer, reflexionó sobre un pasado de Béjar que, insistió, quizá nunca fue mejor, sino que fue el que fue.
El presente no es más que distinto y el futuro será otro. Las fotografías antiguas no son más que imágenes retenidas de otro tiempo que ya no existe. Quizá son los sujetos los que embellecen sus recuerdos, haciéndolos hermosos en su memoria.
Después intervino el catedrático de Derecho del Trabajo de la Universidad de Salamanca y miembro del Centro de Estudios Bejaranos, Manuel Carlos Palomeque López. Su propuesta se centró en una recensión a propósito del título del libro Mientras los ojos de la memoria… que cada lector puede completar según su criterio y forma de pensar. Felicitó a Antonio Sánchez por su excelente trabajo y por haberle dado la oportunidad de escribir el prólogo del libro. Además comentó las disciplinas de las que se ha valido su autor para escribir los textos que acompañan a las fotografías, tan importantes como las propias imágenes porque las complementan, como son la historia, la memoria y la fotografía. Incitó al lector a diferenciar entre memoria, realidad y recuerdos, y desveló al público las distintas partes de que se compone el libro, dividiéndolo según su criterio entre los fotógrafos o artífices de las fotografías, y el resto de las instantáneas propuestas.
Por último tomó la palabra Antonio Sánchez Sánchez, miembro también del Centro, aclarando que este tercer libro de fotografías antiguas tras Béjar en el ayer y Béjar, el placer del recuerdo, con otra publicación intermedia La tarjeta ilustrada en Béjar, ha venido siendo gestado desde hace unos años hasta que ha visto la luz en 2019. En este sentido la división en capítulos es similar al libro precedente. Agradeció tanto la aportación de muchos bejaranos y amigos a la hora de prestarle fotografías y de aclararle dudas para escribir los textos, como la presencia de José Antonio Sánchez Paso y Manuel Carlos Palomeque en la presentación.
Una vez finalizada su intervención el autor proyectó una selección de fotografías contenidas en el libro, siguiendo la división en capítulos, y acompañadas por breves y amenos comentarios que hicieron las delicias del público.
La publicación consta de 166 páginas y unas 200 fotografías antiguas divididas en nueve capítulos: Fotógrafos, La ciudad, Comercio, industria y hostelería, Industria textil, La vida cotidiana, Enseñanza, Personajes, Celebraciones, espectáculos y acontecimientos y Rincones. De pasta dura, su cubierta ha sido diseñada por Óscar Rivadeneyra Prieto con un dibujo que representa al fotógrafo bejarano del Campo Grande de Valladolid Marcelino Muñoz en el patio ducal de Béjar.