- CCOO insiste en que la buena marcha económica debe transformarse en mejores salarios y en un refuerzo de la protección social
El comportamiento del empleo en noviembre vuelve a mostrar dos velocidades dentro de Castilla y León. Mientras en el conjunto de la comunidad se registra un incremento del 1% de paro y 1.035 personas desempleadas más hasta alcanzar las 101.603, Salamanca logra una ligera mejora, reduciendo su desempleo en 57 personas, lo que supone un 0,35% menos y deja el total en 16.172 parados/as.
Este descenso, aunque moderado, es significativo en un contexto marcado por la desaceleración de la contratación y por la persistencia de desigualdades estructurales en el acceso al empleo. La provincia mantiene una alta feminización del paro: el 60,84% de las personas desempleadas son mujeres
Si se analiza la calidad del empleo, el mercado laboral salmantino presenta un avance respecto a la situación regional. En Castilla y León, el 62% de los contratos siguen siendo temporales en cambio, en Salamanca la contratación indefinida alcanza el 44,25%, mientras la temporalidad baja al 55,75%, con 6.548 contratos firmados en noviembre
No obstante, la contratación cayó un 2,6% respecto a octubre, con un descenso especialmente notable en el sector servicios, responsable del 83,76% de los empleos generados, pero también del mayor recorte mensual
El análisis sindical apunta a una conclusión clara: El empleo mejora en estabilidad, pero se estanca en volumen. Además, solo 8.208 personas desempleadas en la provincia reciben algún tipo de prestación, lo que evidencia situaciones de vulnerabilidad prolongada
CCOO insiste en que la buena marcha económica debe transformarse en mejores salarios y en un refuerzo de la protección social. El sindicato reclama incrementar el SMI por encima de los 1.184 euros acordados para 2025, alineándolo con la recomendación de la Carta Social Europea: el salario mínimo debe situarse en el 60% del salario medio neto
En paralelo, pide responsabilidad a las patronales para que los convenios permitan subidas salariales por encima del aumento del coste de la vida.
Así, mientras la comunidad sigue mostrando síntomas de fragilidad estructural, Salamanca se erige como una excepción este mes, aunque la evolución de la contratación anticipa incertidumbre. El reto, según coinciden los sindicatos, es convertir las mejoras coyunturales en empleo digno y duradero, con especial atención a las mujeres y a quienes sufren paro de larga duración.