«La desidia de Martín (PP) y Pozo (Vox) pone en jaque la apertura de La Covatilla»
- TAB entiende que, tal y como está la situación, no se podrían abrir las pistas de altura
Desde Tú Aportas Béjar (TAB) han recordado las declaraciones de su portavoz, Javier Garrido, durante el pasado Pleno Municipal sobre «las serias dificultades» para la apertura del Centro Turístico Sierra de Béjar – La Covatilla por «la desidia del alcalde y de la concejal de la estación en no llevar a cabo las labores propias de mantenimiento e instalación durante el pasado verano».
La formación localista explica que «la obra de cimentación de la estación de retorno del Canchal Negro aún se encuentra sin hacer tras haber dejado pasar todo el verano sin tomar decisiones sobre su puesta en marcha. De este modo, las pistas de altura que son las que acumulan más nieve, no podrán abrirse. La estación de retorno fue comprada la pasada legislatura para solucionar un problema de posicionamiento de la anterior y estaba ya en la zona desde la primavera pasada para comenzar los trabajos.
Del mismo modo, recuerdan que «al finalizar la temporada pasada se entregó un documento a Alcaldía con los trabajos realizados en el Centro de Turismo, las decisiones que habría que tomar a corto plazo y todo aquello que habría que realizar durante el verano».
«Respecto a la revisión del telesilla, aún no se ha hecho nada y salvo que la Junta de Castilla y León prorrogue la realización de la misma, no darán la autorización para la apertura», aseguran. Para TAB «es un tema muy grave» porque, «si no se abre el telesilla ni el Canchal Negro, los ingresos sufrirán una debacle. Lo que sí es cierto es que llegado el mes de noviembre no se ha movido nada en La Covatilla». Garrido considera «aún más grave el que haya colectivos como la Asociación de Empresarios de Béjar o EMBECO que no hayan puesto de manifiesto su disconformidad no sólo en este asunto que será la ruina para muchos, sino en temas tan sensibles como la subida del IBI que pretendía imponer Luis Francisco Martín. Esta ciudad ya está anestesiada de todo».