ROBERTO SÁNCHEZ | Bejarano de a pie preocupado por su ciudad
Estaba yo escribiendo de otra cosa que después enviaré a este digital cuando esta mañana me avisan de una cacería, con perros incluidos, en la finca pública de El Bosque. Hoy estamos, más que nunca, avergonzados de nuestros gobernantes.
Desde el Ayuntamiento se justifican diciendo que tienen los permisos, que es porque los animales estaban enfermeros, que lo ha hecho una empresa especializada, que se ha hecho con presencia de un veterinario, etc. Nos podría contar cómo un veterinario, a ojo, ha elegido qué animal hay que matar a tiros; nos podrá contar por qué los animales heridos han sido rematados a mordiscos por los perros de la jauría; o cuántos animales se han salvado de la purga salvaje por estar sanos.
Existen métodos de caza controlada para animales con problemas de salud. ¿No se habría tenido qué haber hecho un reconocimiento previo para seleccionar cuáles están enfermos? ¿No se podían haber capturado, esterilizado y soltado de nuevo evitando así un crecimiento excesivo?
¿No se debería mostrar públicamente el censo con el número de animales que existía, las analíticas correspondientes (si realmente estaban enfermos), las localizaciones por número de chip, y qué animales habría que sacrificar?.
Deberían explicar porqué no se han usado las fórmulas que se realizan en cualquier otra propiedad, y más siendo pública. Deberían mostrar el número de los acribillados a balas y a mordiscos finalmente, y también ¿QUÉ SE HA HECHO CON LA CARNE Y CON LAS CABEZAS? SI REALMENTE ESTABAN ENFERMOS, ¿SE ESTARÁN COMERCIALIZANDO?
Si no lo hacen, deberían dimitir por incapacidad, incompetencia y ser cómplices de una auténtica masacre.
El 14 de enero de 2019 pasará a los anales de la ciudad como «el día de la masacre en El Bosque».