IMÁGENES | Ruta interpretativa por los lugares y protagonistas de La Gloriosa
- Unas 70 personas acompañaron a los organizadores por un itinerario que comenzó en el mirador de la Plaza de la Constitución
| CARMEN CASCÓN, ENRIQUE GARCÍA E IGNACIO COLL |
Teníamos ganas de repetir aquella ruta interpretativa que convocamos tal día como ayer de 2018, cuando se conmemoraban los 150 años de la Revolución Gloriosa. En este 2024 la asociación Béjar 68 ya no está operativa, pero sí lo están, y por fortuna dentro de nuestro Centro, algunos de los miembros que la componían.
Así, a las 17 horas comenzó el recorrido “«Día de fuego y sangre». Explorando el contexto urbano y social de la Revolución de 1868 en Béjar”, que pretendía dar a conocer algunos aspectos de aquella jornada de 28 de septiembre de hace 156 años, en la que Béjar y sus ciudadanos se adhirieron civilmente a un levantamiento de carácter eminentemente militar, que perseguía un cambio de timón modernizador para una España anclada en el pasado.
Unas setenta personas acompañaron a Ignacio Coll Tellechea y Carmen Cascón Matas en un itinerario que comenzó en el mirador de la Plaza de la Constitución, por tener una panorámica excelente sobre el río y vislumbrar desde allí Bañaduras Bajas, lugar donde se asentó el campamento militar de 1.500 soldados al mando del brigadier Nanetti con el objetivo de acabar con las pretensiones de la Junta Revolucionaria de Béjar y sus ciudadanos de implantar la democracia en España. Después se trasladaron al lugar más elevado de Béjar, al inicio de la calle llamada entonces del Collado, hoy Flamencos, donde se supone que pudo estar la barricada de Campopardo. Allí se posicionó uno de los cañones de mayor calibre fabricados por el herrero Víctor Gorzo y con los que se respondió a la artillería de las tropas isabelinas.
Más tarde, el grupo pasó a la Puerta de Ávila, lugar de memoria de la Revolución, al situarse en ese punto la Puerta de la Villa y su barricada, el símbolo de aquellos días, inmortalizada por el fotógrafo francés Juan Cambón en uno de los primeros reportajes de guerra de España. También se rescataron los nombres de José Fronsky, el polaco que dirigió militarmente el levantamiento, Domingo Guijo, el presidente de la Junta Revolucionaria, Aniano Gómez, el líder republicano de los sucesos de Alcoy, o el brigadier Juan Nanetti, el responsable de las tropas.
El siguiente punto de encuentro fue propia Corredera, con una fisonomía muy diferente a la que ahora conocemos, acceso y confluencia de las tropas desde el Puente Viejo y Puente Nuevo, el núcleo del barrio de La Corredera, a extramuros, que sufrió los desmanes de los soldados en su retirada. En este sentido, gracias a la amabilidad de sus propietarios, pudimos entrar en dos casas de la calle Libertad, donde los testigos que declararon el juicio abierto a los dos días de los acontecimientos atestiguan que sucedieron muertes, acosos, destrozos y robos.
La ruta finalizó en el Puente Viejo, por donde las tropas se retiraron sin conseguir tomar la ciudad tras horas de “fuego y sangre” (según la descripción de Juan Muñoz Peña en Béjar al vapor, escrito en 1868), no sin antes fusilar a algunos paisanos que habían sido hechos prisioneros. El mismo día en que estos acontecimientos tenían lugar, la Revolución triunfaba en la batalla de Puente Alcolea, iniciándose el Sexenio Democrático. Béjar pasó a ser así un símbolo del nuevo régimen, recibiendo por el arrojo y compromiso de sus ciudadanos los títulos de Liberal y Heroica.
A lo largo de toda la visita se fueron leyendo los escalofriantes testimonios de los testigos, se mostraron fotos de la época o planos de cómo era la ciudad. Y al concluir se entregó el cómic Ferias de sangre, de Óscar Rivadeneyra Prieto, editado por la Diputación de Salamanca en 2018, además de mostrar un QR donde se puede descargar la bibliografía básica sobre la Revolución.
Agradecemos a todas las personas que nos acompañaron su interés, paciencia y entusiasmo, al Ayuntamiento de Béjar por promocionar la ruta interpretativa dentro de su programa de Ferias, a la Agrupación Socialista Bejarana por su presencia y especialmente a los propietarios que nos permitieron vivir la experiencia única de sentir los lugares en que sucedieron algunos de estos hechos.