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Béjar prioriza el espectáculo en medio del vacío presupuestario

  • Para cuadrar los 132.885 euros del contrato para las fiestas patronales 2025, se han minorado partidas presupuestarias de Cultura, mantenimiento de edificios, actividades deportivas y servicios generales

En Béjar, donde la gestión municipal avanza a tientas sin presupuestos aprobados para el presente ejercicio y con una moción de censura sobrevolando la casa consistorial, el equipo de Gobierno PP-Vox ha decidido echar el resto para las fiestas patronales de 2025.

Y lo hace sacando a licitación un contrato «la organización, producción, imprenta y contratación de artistas, orquestas, espectáculos y fuegos artificiales para las fiestas patronales de 2025» por un total presupuestado de 132.885 euros. En un claro contraste con el Corpus Christi, declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional (FITI), cuyo presupuesto ascendía a 18.000 euros.

La decisión llama especialmente la atención por el contexto: Sin presupuestos municipales vigentes y con una evidente falta de liquidez que ha obligado al propio Ayuntamiento a rebañar de otras partidas ya comprometidas. Así, para cuadrar esta inversión festiva, se han minorado fondos de áreas como cultura (2.000 €), mantenimiento de edificios (1.950 €), atención a actividades deportivas (1.135 €) y servicios generales (3.000 €). Un total de 8.085 euros retraídos de otras áreas para poder mantener esta ‘prioridad municipal’. A todo esto, hay que sumar los 12.396 euros adjudicados para la «organización, producción y realización de conciertos ‘música en directo’ en terrazas y residencias de la localidad durante las fiestas patronales». De esta manera, el gasto se dispara hasta los 145.281 euros en total, y como base.

Además, hay un detalle simbólicamente revelador: Por primera vez en la historia reciente de Béjar, no se contrata a ningún grupo conocido de referencia, sólo orquestas y macrodiscotecas de gran formato, con tráileres de hasta 24 metros y exigencias técnicas propias de un festival nacional.

NOTA EDITORIAL

Resulta difícil justificar esta inversión en fuegos de artificio cuando las necesidades estructurales de la ciudad siguen sin resolverse. Béjar enfrenta una preocupante inercia en servicios sociales, mantenimiento urbano y reactivación económica. Sin embargo, el equipo de Gobierno PP-Vox ha optado por la política de escaparate: Grandes eventos y luces de colores, aunque detrás el escenario esté sin montar.

Las fiestas, sin duda, son necesarias. Pero lo son también la coherencia y la responsabilidad. Y en Béjar, este verano, lo que parece haber sobrado en pirotecnia ha faltado, una vez más, en planificación.