Opinión

Respuesta desde la Residencia del Buen Pastor a la carta abierta de Gregorio Maíllo Álvarez

LA DIRECCIÓN Y LA JUNTA DIRECTIVA DE LA RESIDENCIA DEL BUEN PASTOR

De la lectura de la carta parece que su firmante no es consciente de la trágica situación derivada del coronavirus que se vive en España. Y que se muestra especialmente difícil en las residencias de ancianos, en las que asistimos a los más vulnerables, con unos medios y recursos pensados no para la atención hospitalaria, sino para la residencial.

Por ello, desde la dirección de EL BUEN PASTOR, nos sentimos orgullosos tanto de los residentes, como del personal que trabaja sin descanso en la residencia, como de la gran mayoría de los familiares que han entendido y valorado todas las estrictas medidas de seguridad adoptadas, por cierto mucho más tempranamente que en otras instituciones.

Entre dichas medidas, coordinadas con la GERENCIA DE SERVICIOS SOCIALES, está lógicamente el aislamiento de los residentes que presentan síntomas de la enfermedad, puesto que, como sabemos, hasta la fecha ha resultado imposible realizar los test para conocer con seguridad el estado de cada residente. Quienes se encuentran en esa situación han debido ser tratados de forma personalizada y trasladados de sus habitaciones, restringiéndose el contacto con cualquier persona para evitar el contagio. Debemos proteger a nuestros residentes y también a nuestro personal.

En estas circunstancias, no parece muy justo que el autor de la carta abierta, vulnerando la intimidad de una familiar residente, utilice la presunta dificultad de comunicarse con ella a través de su móvil, para arremeter sin razón contra la junta directiva, que ha encarado los problemas derivados del coronavirus con una absoluta dedicación y con la máxima diligencia.

Resulta triste que el autor no aproveche para agradecer a todo el personal, médicos, enfermeras, asistentes, limpiadores, etc la impagable labor que desarrollan, quienes seguro verán con estupor que, en lugar de colaborar entendiendo y valorando las medidas adoptadas, desde su cómoda posición, hable de denuncias y de retóricas ofertas de ayuda.

La junta directiva del centro considera que la información del estado de salud de los residentes tiene que ser transmitida por personal sanitario para que sea lo más fiable y técnica posible y así evitar incurrir en errores o confusiones. Esta información se está trasladando siempre que hay un cambio en el estado de salud de algún residente o cada 24 horas cuando el estado es grave. Y se está haciendo así en todos los casos. El señor Maillo no es una excepción.

Finalmente esperamos rectifique las insultantes manifestaciones sobre los fines que, a su juicio, pretenden quienes forman la Junta Directiva del Buen Pastor, cuyos miembros se reservan las acciones que pudieran competerles en defensa de su dignidad.

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad